Mientras están en uso.
Airearlo con frecuencia para evaporar la humedad retenida durante el sueño.
No exponerlo a una fuente de calor.
No saltar ni realizar actividades bruscas sobre el edredón. Podría provocar el desplazamiento del relleno por entre los tabiques interiores de la funda, y su distribución de forma irregular. Esto perjudicaría seriamente al rendimiento del Nórdico.
Cuando no se utilice.
Conservarlo en lugares secos, ya que la humedad reduce el volumen y perjudica seriamente el relleno.
Guardarlo en su propio envase.
Para su limpieza.
No usar aspirador, ya que la fuerza del aire separa los hilos del tejido provocando que el relleno salga al exterior.
El lavado. Los nórdicos de pluma admiten el lavado con detergentes muy suaves, pero es importante señalar que nunca se debe lavar si el secado no se hace de forma inmediata en máquina secadora, asegurándose que ambas máquinas (lavadora y secadora) tienen capacidad para admitir y soportar el volumen y el peso que adquiere el nórdico con el agua. De no tener esta certeza, lo mejor es confiar la limpieza del nórdico a un buen profesional.
Consejos ofrecidos por Due Casa y si necesitas algún relleno nórdico para tu hogar no dudes en visitar la sección especial de rellenos nórdicos de Galindo Hogar.
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